domingo, 20 de octubre de 2013

Al atardecer de la vida... el inicio de la crónica eterna...

Casida del sueño al aire libre

Flor de jazmín y toro degollado.
Pavimento infinito. Mapa. Sala. Arpa. Alba.
La niña sueña un toro de jazmines
y el toro es un sangriento crepúsculo que brama.
 

Si el cielo fuera un niño pequeñito,
los jazmines tendrían mitad de noche oscura,
y el toro circo azul sin lidiadores
y un corazón al pie de una columna.

Pero el cielo es un elefante
y el jazmín es un agua sin sangre
y la niña es un ramo nocturno
por el inmenso pavimento oscuro.

Entre el jazmín y el toro
o garfios de marfil o gente dormida.
En el jazmín un elefante y nubes
y en el toro el esqueleto de la niña.



Federico García Lorca, Diván del Tamarit


(http://ricardogomez-acuarelas.blogspot.com.es)

¡Oh, bella Zoraida!, anhelo de amor y agua;
estrella que me acompaña, día y noche en mi alma, 
¡Oh, bello ensueño de la Alhambra!, recoge entre tus ardientes manos, 
el beso cálido que mis suspiros me aclaman...



Esta es mi crónica; la crónica de mi pasado, mi presente, mi futuro... la crónica de una vida a los pies de un verso improvisado...

(http://www.shuttlespain.es/es/la-alhambra-granada/)




No hay comentarios:

Publicar un comentario